ES HORA DE ACCIONAR
"Entonces Jehová le dijo a Moisés: ¿Por qué clamas a mí? Díle a los hijos de Israél que marchen."
Éxodo 14:15
Muchas veces se nos ha enseñado acerca de la importancia de la oración: hablar con Dios en todo momento, decirle nuestras alegrías, nuestros temores, tristezas y nuestras dudas. Pedir su dirección a la hora de afrontar decisiones o situaciones difíciles e la vida.
Una vida de oración es un elemento clave en la vida cristiana, pero también debe haber lugar para la acción. En ocasiones sabemos qué hacer, pero oramos para pedir más dirección como una excusa para justificar que no queremos actuar. Si sabemos lo que tenemos que hacer, es tiempo de accionar.
Debemos entender que Dios es tan real como los seres queridos, como la familia y que tenemos la bendición de hablarle en cualquier momento.
En el capítulo 14 del libro de Éxodo vemos al pueblo hebreo entre la espada (los egipcios) y la pared (el mar rojo). Se encontraban en un momento crítico. Sólo un milagro los podría salvar. Esto llevó al desánimo y la rebeldía a muchos de los que allí se encontraban, algunos llegaron a insinuar que "... mejor nos fuera servir a los egipcios, que morir nosotros en el desierto" Éxodo 14:12
Moisés, en ese momento delicado, actuó como el líder que era, infundiendo ánimos a aquellos que le rodeaban "Jehová peleará por vosotros, y vosotros estaréis tranquilos" (Éxodo 14:14) dijo con firmeza.
Pero vemos que Moisés tenía también sus temores. Siguió clamando a Dios por salvación y es en ese momento cuando Dios le dice a Moisés las palabras que abren este artículo.
¿Por qué clamas a mi? ¡Avanza! Muchas veces tenemos fe en que Dios nos va a librar, pero no actuamos conforme a nuestra fe. Otra veces nos concentramos tanto en los problemas, mencionándoselos una y otra vez a Dios en nuestras oraciones, que no nos levantamos con fe creyendo que Dios ya escuchó nuestro ruego y que ahora debemos avanzar. O simplemente preferimos quedarnos en el lamento porque no queremos ir en la dirección que Dios nos ha indicado. Después de todo, Dios nos había dicho que avancemos cuando frente a ellos lo único que había era ¡el Mar Rojo!
Recordemos que la fe actúa en aquellas circunstancias donde necesitamos que actúe lo sobrenatural de Dios.