En BBC leí la historia de un hombre que asegura que encontró el secreto de la felicidad en el silencio y que lamenta que sus hijas adolescentes no tengan oportunidad de disfrutarlo por lo que dices al final. Él lo descubrió al sube el Everest y caminar por el Polo Norte, y que implica ese inmenso espacio de reflexión. A mí me ha servido -incluso con lo doloroso- de la soledad para entenderme.
por aca andamos pensando cómo tener espacios de silencio en medio de la ciudad, ciertamente que por las complicaciones económicas es como más difícil ir a los lugares "propicios" sin embargo es importante en medio de la vida cotidiana tener estos micro momentos.