La felicidad puede definirse como ese estado de ánimo donde nos sentimos completamente satisfechos y llenos al disfrutar de algo bueno, esos momentos que nos hacen verdaderamente libres, que nos complementan y que muchas veces son tan cortos pero tan infinitos en el espacio-tiempo. 

Si tuviéramos la oportunidad de elegir hoy en día de invertir nuestro tiempo y energía  en lo que probablemente fuese lo más grandioso para nuestro futuro... ¿Qué elegirías? ¿Qué quisieras ser cuando “grande”? ¿Qué seria completamente necesario para sentirte pleno de aquí a unos años? 

Todos los días se realizan diferentes estudios de campo para saber y cuantificar gustos, deseos, opiniones y maneras de ver el mundo de diferentes perspectivas. Un grupo de investigadores realizaron estas mismas preguntas a una población de jóvenes – adolescentes, donde el resultado arrojo que un  80% quisieran para el futuro hacerse ricos, otros 50% de esa misma población dijo que lo más importantes para ellos seria ser famosos.

Pasamos gran parte de la vida trabajando duro, cuesta arriba, sin parar, para alcanzar un supuesto fin lleno de todo aquello que un día añoramos y que irónicamente al pasar los años ese mismo fin va cambiando hasta sin darnos cuenta terminar donde algún día empezamos. 

Una supuesta felicidad absoluta...

 No nos damos cuenta que el camino que estamos recorriendo es más importante que la meta en sí. Ese camino lleno a veces de obstáculos, de buenos y malos momentos... De experiencias satisfactorias y  encuentros desagradables, toda la experiencia obtenida de allí es más importante y gratificante que el mismo premio a obtener.

Los humanos tenemos un don y una desgracia (depende de la perspectiva en que lo veamos); y es que tenemos una memoria bastante selectiva y fugaz. Esto como aspecto positivo nos ayuda a olvidar ciertos momentos que fueron negativos y superarlo de manera más rápida, pero también nos hace caer una y otra vez en los mismos errores, las experiencias a veces no nos marcan de manera tan significativa y el aprendizaje obtenido de ella hace que se pierda con el pasar del tiempo. Y eso no está nada bien. La vida es demasiado corta como para no aprender de nuestros errores.

Es por ello que un grupo de personas nos ofrecieron una de las mejores investigaciones que se podido realizar  ¿Si pudiéramos estudiar a un grupo de individuos desde su adolescencia hasta la adultez? ¿Si pudiéramos ver que tan sanos y felices se desarrollaron con el pasar de los años? 

Estas fueron las premisas que dieron como objeto al estudio el cual fue realizado por la universidad de Harvard, se considera unos de los estudios más largos de la vida Adulta en la Historia, 75 años han pasado desde que se originó esta idea, siguiendo paso a paso la vida de 724 Hombres; preguntándoles seguidamente como esta su vida personal, amorosa, hogareña y de trabajo. 75 años haciéndoles seguimiento para poder documentar cada resultado y así poder observar como fluctúan sus vidas. Hoy en día solo 60 de esos 724 hombres siguen con vida y aun participan en el estudio; todos ellos con sus ya casi noventa y tanto años.

El estudio se amplió significativamente y ya no solo se estudian ese grupo de hombres seleccionados sino también sus más de 2000 hijos.

El estudio comenzó involucrando dos grupos de hombres:

• El primer grupo fueron seleccionados cuando estaban en segundo año de Harvard; todos ellos terminaron la universidad durante la segunda guerra mundial, para luego irse a la guerra

• El segundo grupo fue escogido con algunos jóvenes de los barrios más pobres de Boston, específicamente porque venían de familias con problemas y muy desfavorecidas. (sin servicios básicos, alimentación balanceada, etc.)

A todos estos adolescentes se les realizaron exámenes médicos, visitas a sus casas y  entrevistas a sus padres.  Con el pasar de los años estos adolescentes se hicieron adultos, cada uno escogiendo el camino que más les interesaba y que el destino les llevo a tomar. Cada uno hizo su vida.

Cada uno de ellos escogió su rumbo, algunos fueron  Abogados, médicos, albañiles otros cayeron en el alcoholismo y hasta esquizofrenia. Algunos tuvieron una vida llena de éxitos constantes, escalando cada vez más, mientras otros fueron totalmente lo contrario. Uno de ellos llego ser Presidente de los Estados Unidos de América.

Cada dos años se les envía un cuestionario a todos los involucrados a ver que tanto ha cambiado su vida desde esa última vez, se le hacen visitas y se les revisan hasta sus archivos médicos.

Después de 75 años de estudio y ya con una base solidad de investigación surgen las siguientes interrogantes ¿Qué hemos aprendido de ellos? ¿Qué lecciones nos dejan después de tanta miles de páginas de investigación?

Para sorpresa de todos, el resultado no arrojo nada sobre si la importancia de la vida es tener fama riquezas y lujos. El mensaje más claro de esta investigación después de 75 años es este:

Las buenas relaciones nos hacen más felices y más saludables.

Las relaciones tienen tres puntos muy importantes; los cuales son:

• Las conexiones Sociales nos hacen bien, la soledad mata. Las personas con más vínculos sociales: familia, amigos y conocidos son más felices más sanos y viven más. La soledad es toxica, Las personas que viven su vida en soledad tienden a ser menos felices y a  decaer mucho en su salud en la mediana edad.

• Cantidad vs Calidad ¿De qué sirve tanto si tenemos tan poco? De qué sirve estar rodeado de miles de personas si al igual nos sentimos solos. La calidad de una buena relación tanto en tu matrimonio como en la  familia general lo es todo. Una pareja donde no se demuestren muchos afectos y la relación sea insana puede resultar mucho peor que un divorcio. El estudio demuestra que estos hombres al llegar a una edad de 50 años se podía saber cómo culminara en gran parte su vida dependiendo de las relaciones sanas que tuvieron a su alrededor. Una mala relación a esta edad hace que los dolores físicos se incrementes y que se tarde más en sanar, mientras que una buena relación hacia que esto fuese todo lo contrario, los pacientes avanzaban progresivamente y de manera positiva al tener mayor afecto de sus seres queridos cercanos.

• El tercer punto trata sobre las relaciones y la salud, las buenas relaciones no solo mantiene sano el cuerpo, sino también el cerebro. Contar con una buena relación a los 80 años hacen que los recuerdos se mantengan más nítidos, esos buenos momentos compartidos podían borrar todas aquellas pequeñas peleas que siempre suceden y por lo tanto vivir de manera más felices a pesar de todo.

Este pequeño mensaje es una sabiduría que siempre nos encontramos y topamos a lo largo de la vida, pero ¿Por qué es tan fácil olvidarla y no ponerla en práctica? la respuesta es sencilla. Porque somos Humanos.

Siempre queremos una solución rápido a todo, el cuidar a los amigos y familia no es algo que nos termine de captar la atención, lo vemos un poco aburrido y difícil de mantener, pero sin saber que una buena relación dura para toda la vida. Nunca termina.

El estudio demuestra que las personas que se inclinaron por las riquezas y la fama creyendo que así tendrían una vida plena estaban equivocadas, las personas que se inclinaron más a las relaciones y a la familia les fue mucho mejor en todos los aspectos.

¿Por qué no empezamos a cambiar eso hoy? ¿Por qué no pasamos más tiempo con los seres queridos y no tanto a la pantalla? ¿Por qué no hacemos algo nuevo con esa persona que nos gusta o que escogimos como pareja de vida? ¿Por qué no visitamos ese familiar que tenemos tanto tiempo sin ver? Aprovechemos el tiempo que tenemos, que la vida es muy corta para malgastarlo en malos momentos. Aprovechemos cada segundo que tengamos para demostrar, para sentir, para vivir.

Dediquemos tiempo para Amar.

Fuentes

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fuente bbc

psicologiaymente.net