Mi Hobbie de Motera

Mi Hobbie de Motera

Participar en las actividades que mas entusiasma a los moteros de todas las latitudes son los eventos, pues brindan la posibilidad de viajar, conocer, reunirse, compartir y exhibirse todo en el marco de una celebración donde aprovechan para interactuar y disfrutar, normalmente por un fin de semana de múltiples alternativas, enfocadas básicamente a su esparcimiento y distracción. Son variadas las opiniones que se pueden escuchar acerca de estas dos modalidades de reunión motera a nivel nacional. En la primera los motoclubes, a veces, conjuntamente con alguna empresa promotora de espectáculos, se esfuerzan por crear un gran show colocando tarimas, presentando grupos musicales, haciendo concursos, alquilando stands a particulares, ofreciendo bebidas y comidas… todo por agradar al motero visitante, quien cubrirá esta inversión con la compra del famoso kit, el cual, siendo muchas veces contentivo solo de dos o tres artículos que deben tener el costo más económico posible para sacar ganancias que cubran los gastos y deje algo al bolsillo de los organizadores… en la otra modalidad los motoclubes se las ingenian para sufragar mediante gestión propia, donativos y patrocinantes los gastos, ofrecen comida, bebida, una que otra agrupación con una mínima o ninguna colaboración monetaria a los moteros invitados, su presentación no es tan ostentosa es más bien familiar pero básicamente está destinada a agrupar y reencontrar a los moteros que asisten a compartir. Ambas modalidades tienen el mismo fin, la de reunir a los moteros, quienes siempre están ávidos de viajar y de lucir sus “caballos de acero” sin embargo poco a poco se ha ido perdiendo el fin primordial de realizar estos evento, que al principio no era otro que la de reunir a los moteros y disfrutar de los reencuentros entre amigos, conocidos y la camaradería del ser motero. Se han ido consolidando año tras año por costumbre encuentros moteros como lo son: Mérida, San Cristóbal, Coro y Margarita y la Colonia Tovar. Tanto es así que últimamente se están realizando dos eventos uno para “alta cilindrada” y otro para “baja cilindrada” tratando de cubrir el espectro en moto y sacar más “ganancias”. El estándar dice que por cada evento asisten de unos ochocientos a mil trescientos, de una estimación de unos cuatro mil y tantos a nivel nacional. Han surgido alternativas interesantes donde quiero resaltar la de Aguasay (Maturín), la del 1er. encuentro Miranda en 2 ruedas (Los Téques), Joropomoteando (Apure), unión motera porteña (Puerto Cabello), donde se ha hecho gala del más puro sentimiento de unión y hermandad con una clara respuesta de apoyo por parte del mundo motero y una excelente organización. Con beneficios que puedan ofrecer al motero asistente, como ambulancias en el sitio, paramédicos, seguros para accidentes temporales, seguridad, sitios para lavar la moto, cambio de aceite, convenios con hospedajes y restaurants, kits contentivos de artículos útiles con mas relación costo-valor, alimentación y bebidas incluidas con la entrada, colocar personas de la comunidad que vendan comida dentro del evento sin que tengan que pagar millones por un stand dándole no solo participación a la comunidad, lo que contribuye a la integración, sino brindando comida y bebida casera a buen precio. Se debe ir planificar en organizar un gran encuentro macro a realizarse en el centro del país, donde se recoja para obras benéficas que tanto hacen falta, niños con cáncer, investigación y prevención del cáncer de mama, orfanatos, ancianatos, niños de la calle, en fin la lista sería muy larga pero sería un evento digno del espíritu motero y para cambiarle la imagen a este tipo de actividades. Las actividades benéficas se realizan actualmente de manera aislada y por algunos motoclubes según su capacidad y corazón, pero debería ser una actividad macro por parte de las agrupaciones que hacemos vida motera en el país, pues un gran evento a nivel nacional a beneficio de…, debemos demostrar que no solo somos chicos rudos montados en costosos vehículos como nos ve la gente, sino que también estamos conectados y preocupados por las necesidades de quienes nos rodean. El fin específico de cada una de estas actividades debe estar centrado y enfocado a brindar la mayor cantidad de beneficios y comodidad al motero asistente. Buena ruta y buena vibra motera.

Fotofrafcia plaza Bolivar El Hatillo con mi Cel