Literatura Renacentista: Dante y la Divina Comedia
La obra de la Divina Comedia fue escrita en un período comprendido entre los años 1309 y 1321. Según la historia, Dante Alighieri terminó de escribir la composición en cuestión poco antes de morir.
La época era turbulenta cuando fue escrita la obra en cuestión, pues, Florencia vivía un período de contraposiciones de sectores sociales debido a la transformación que experimentó como potencia económica y financiera. Un importante desarrollo industrial fue característico de dichas circunstancias.
Dante fue originario de Florencia y provenía de una familia Güelfa de Alighiero. En medio de mencionada época, enmarcada dentro de una tormenta política-social y el desarrollo industrial, este grupo familiar se inclinaba a las pretensiones del papa y del emperador. Durante su vida en Florencia, Dante conoció una mujer llamada Beatriz, hija de Folco Portinari, de quien se enamoró, mas no se casó con ella, pues, la mujer se casó como otro hombre; Dante contrae matrimonio con Gemma, hija de Maneto Donati, con quien logró tener tres hijos.
En el año 1301, Dante se traslada hasta el vaticano con el propósito de entrevistarse con el papa, a fin de conseguir el entendimiento entre los blancos y los negros; sin embargo, su intento se vio frustrado por la intervención de Carlos de Valois, quien entra en Florencia y en un acuerdo con los blancos destierran a los negros.
Para el año 1302, Dante es juzgado en Siena y condenado al exilio. De manera que tuvo que acobijarse en las ciudades enemigas de Florencia. Durante este exilio Dante escribe la composición que llamó en diferentes oportunidades Comedia, Sagrado Poema y Poema Sacro; hoy día se conoce como “Divina Comedia”, y su nombre contemporáneo responde a las pretensiones de aludir a lo sagrado y a lo artístico.
La trama de la obra comienza con la narración de un largo viaje que emprende el mismo Dante, en el cual transita por tres reinos: el Infierno, el Purgatorio y al Paraíso. Su desarrollo se enfoca en el trayecto de su viaje, en el que observa los castigos que experimentaban los culpables en el Infierno, las penitencias de aquellos que anhelaban el perdón y la alegría de quienes habían sido salvados. Al menos así lo expone su pasaje inicial, donde Dante describe su encuentro con Virgilio en el infierno.
La siguiente imagen, es una pintura realizada en el año 1495 por el pintor Domenico di Michelino, la cual llamó "La Divina Comedia de Dante". En ella se puede apreciar al personaje que representa a Dante, quien tiene en su mano izquierda "la Divina Comedia", mientras que con su mano derecha señala el camino de los pecadores:
La obra Dante guarda las características propias de una obra renacentista. En primer lugar, cabe destacar el ambiente que describe el autor, porque corresponde a un medio cargado de elementos religiosos debido a que se habla de Infierno, Purgatorio y Reino de los Cielos. Esto es evidencia de la conexión de Dante con los textos religiosos de la época y, como todo güelfo, su inclinación hacia la autoridad papal. En esta obra se puede determinar la marcada diferencias entre lo pagano y lo divino, la condena y la salvación; son las dualidades mediante las cuales es orientada la composición.
Por otro lado, el carácter antropocéntrico y humanista es evidencia de la influencia renacentista que vivió Dante. El presentarse como impulsor de su salvación y la de todos, coloca a Dante en el centro, como hombre que sustenta su existencia y genera historia por acierto y por yerro. La inclusión de nombres significativos para su vida, tales como Virgilio, de quien da gala de su admiración, y Beatriz, aquel amor inconcluso y recordado, propone añadir a la obra de ficción algo real.
La Divina Comedia muestra la posición doctrinal religiosa de Dante; la descripción sobre el Infierno, el Purgatorio y el Cielo es una corriente de pensamiento discordante con otras religiones. Entre matices del oscurantismo y las luces, Dante presenta distintas facetas de los hombres en los tres sitios del trayecto que presenta en su obra. Es como si él pretendiera cavilar la actitud y forma del ser humano en los destinos que tienen trazados por causa de sus obras. De esta forma, Dante se pasea entre lo religioso y lo mistérico, lo subjetivo y lo real.
Esto, marca un carácter altamente renacentista, debido a la corriente de pensamiento mitológica y religiosa. La presente imagen corresponde a una obra de Gustavo Doré, la cual se basa en el canto XXXI de la Divina Comedia de Dante. Esta pintura se conoce por los siguiente nombres "Inferno" o "Los Titanes":
Por: Richard del Jesús
Interesante recorrido histórico. Es un tema denso e interesante.