Legislador insinúa que no habrá solución para los dreamers

En medio de la tensión generada en la comunidad inmigrante por el acuerdo de reapertura del gobierno, aunque sin solución para los dreamers, una voz en el campo republicano se ha alzado para empeorar las cosas.

Según trascendió, el acuerdo entre republicanos y demócratas establecía fijar una fecha para discutir en breve el tema de DACA. Sin embargo, ahora pudiera resultar poco probable que la bancada en el Congreso del partido que gobierna el país apruebe una ley de inmigración.

Al menos esto es lo que ha insinuado Steve Scalise, representante por Luisiana, quien aseguró que a los republicanos no les interesa “enfurecer a nuestra base”.

De hecho, Scalise rechaza la promesa hecha por el líder de la mayoría en el Senado, Mitch McConnell, de que antes del 8 de febrero se llevaría a voto el Programa de Acción Diferida para Llegados en la Infancia, más conocido como DACA, que ampara a más de 800.000 jóvenes inmigrantes traídos por sus padres a Estados Unidos.

Según el portal Politico, Scalise dijo: “El plazo vence en marzo... pero la Cámara de Representantes no fue parte de ese acuerdo.”

Este programa que les brinda amparo a los jóvenes contra las deportaciones expira precisamente en el próximo mes de marzo.Durante tres días se produjo el llamado “cierre del Gobierno”, luego de que los representantes demócratas se negaran a votar sobre una resolución continua para financiar al gobierno, si no se incluía un voto para extender el DACA; mientras los republicanos se negaban a incluirlo en la legislación sobre las asignaciones.
El cierre terminó después de que McConnell acordara llevar en breve una discusión sobre DACA al pleno del Senado.
Sin embargo, ahora Scalise alza la voz para alertar de que la Cámara no llegará a ningún arreglo.
“No vamos a aprobar un proyecto de ley que incluya una amnistía [para los soñadores] -precisó-. Hay cosas que enojarían a nuestra base y no veo que sea aprobada por la Cámara.”
El pasado 11 de enero, los senadores Dick Durbin, demócrata por Illinois, y Lindsey Graham, republicano por Carolina del Sur, les presentaron al presidente Donald Trump un proyecto bipartidista de inmigración que incluía cuatro puntos analizados esa misma semana entre la Casa Blanca y los principales legisladores