Entre fariseos y publicanos. La vía a seguir...
Cuando se habla de algunas
El abordar el concepto de fariseo y del publicano, se está basado en el relato bíblico de nuestro señor Jesucristo, donde evidenciamos un gran contraste entre estos dos tipos de hombres con sus respectivas representaciones tradicionales, el primero sería el aspecto más referenciado negativamente por ser los grandes rivales del pueblo judío en tiempos de Jesús (el fariseo) y el otro sería aquellos que han sido reprobados y anulados como correctos cumplidores de la torá, es decir, “los malos” judíos (el publicano), ambos son pecadores, porque necesitan el afiemi tas amartía, o sea el perdón de Yahvé. Mientras oraban el uno le tiraba piedras a otro🪨🪨, mientras el otro soportaba sin levantar su cabeza 🙏🏻. ¿Muchas veces somos como esos malos fariseos (casi siempre🤭 está incrustada en nuestra vida personal el llamado fariseísmo) pero algunas veces, nos tocan ser el publicano🙄 así que cual eres tú?🪨🙏🏻🤔 Hay que elegir siempre esa muerte del ego propio, ser humildes hijos de Dios.
Uno debe recordar que somo como este grupo, que busca entrar al propósito de edificar y vivir respetando la palabra de Dios y anhelando la santidad concreta. Aquí y ahora.
No aceptamos personas que solo sean las llamadas “espiritualistas”, que quieran imponer o criticar las diferencias de vivir el evangelio con radicalismo de autenticidad, porque muchos se esconden en aquello que llaman el que quiera fomentar desorden, como si el evangelio fuera una búsqueda de especie de modo Zen de vivir.
Automáticamente debemos buscar que nuestros egos sean eliminados y bloqueados del mundo. Gracias porque este llamado es el del combate espiritual, tan difícil pero que su atención y guarda es crucial. Siempre en consonancia con la paz, y la comprensión de quien recomienza siempre en el duro andar de la Vida, como lo hacía Jesús con cada encuentro personal y conforme a la paz de Dios luego del Camino de Cruz.