La Luna es el compañero de viaje de nuestro planeta y es también el único cuerpo celeste que el hombre ha visitado hasta ahora. Desde sus peculiaridades científicas hasta la forma en que afecta nuestras vidas, la Luna es un misterio que seguramente debe examinarse cuidadosamente.

Incluso si la actividad geológica de esta gran masa rocosa es relativamente escasa, incluso en la Luna hay terremotos. Hay cuatro tipos diferentes de terremotos: 3 de estos ocurren en profundidad son prácticamente inocuo, pero el cuarto tipo alcanza hasta 5,5 en la escala de Richter con una duración de unos 10 minutos. Según la NASA, estos terremotos hacen que la luna suene como una "campana".

Eugene zapatero era un famoso astrónomo y geólogo, que, gracias a sus estudios y la investigación fue fundamental para los diversos alunizajes que ha habido en la historia. Este científico quería ser un astronauta para llegar a la Luna, pero debido a algunos problemas físicos, nunca podría convertirse en uno. Cuando murió, la NASA cumplió su deseo enviando sus cenizas a la Luna con el Lunar Prospector en 1998.

Uno de los mayores problemas encontrados durante los envíos lunares es el polvo lunar. Aunque es delgada como la harina, también es extremadamente áspera. Debido a la baja gravedad de la Luna, esta arena se adhiere a todos lados. Las botas de los astronautas fueron completamente consumidas por esta arena, casi como papel de lija.

La gravedad en la luna es 1/6 en comparación con la Tierra, pero incluso si es menor, moverse en la Luna es extremadamente difícil. Los trajes espaciales son engorrosos y las piernas se hunden en el suelo hasta 15 centímetros. Incluso si la gravedad es baja, la inercia de una persona es muy alta. Para los astronautas moverse rápido o cambiar de dirección era muy difícil, por esta razón tuvieron que moverse saltando como canguros.