Hace tiempo me decía una amiga que solía sentirse muy mal cuando pensaba en que dejaría de ver a ciertas personas. Yo le comente que es realmente algo muy natural, pero es que no todos tienen la experiencia de desprenderse de quienes nos rodean. Creo que esa habilidad para no apegarse a las cosas ni a las personas es muy buena. Y no quiere decir que no te importe la gente, sólo que sabes que la vida está llena de encuentros y desencuentros.
Depende mucho de la personalidad de la persona. Hay veces que cuesta mucho soltarse, pero es porque es nuestro instinto, o eso creo yo...