No  retrocedas.

Ojos hermosos
Después de todo, te fuiste. Hora de decir adios
Sobre todo el anhelo de la tierra poniéndose al día.
La ventisca se dormirá y desaparecerá,
Saber lo que te ama lindo!

Escribo y me callo,
Y en tranquila emoción
No son capaces de ofender
Y yo estoy vestida
Estoy triste, pero no como antes.

Por honor, por hogar, por hogar.
Tus ojos no ven más.
Mi tono mentorial de eco suena en épocas,
Y nuestro Dios prometió a todas las personas.
En lencería elegante encaje.

Me quedaré con él, pasaré la página,
Se sienta como una bestia en el fondo de un aislado
Bendita esposa amorosa
Necesitamos defender la tierra.
Escucha hosco.

Feliz quien entienda podrá
Crucificando el dolor al suelo.
Te lo pido, te lo ruego, te ruego:
¿Podría reconciliarme como antes?
Qué pocos los que dicen: no sé.

El hombre para el hombre es una bestia
Estoy dispuesto a apoyar los principios de honor, voluntad y bondad.
Pero quiso vivir con esa palabra
Quien pasó por la separación una vez.
Su amor se reveló a sí mismo.