Y miro,  miro  por  la ventana.

Y los trineos van ganando carrera.
Tan ingenuos y unidos en vano se separarán juntos
Y entonces, ¿qué es el pecador?
Fue el mismo carrusel.

Por sus oraciones Dios es él mismo.
Una puerta tras otra,
Traerá sobre sí mismo los cíclopes.
Recuerdo haber sido atormentado por el dolor.

Solo para ver el resplandor del fuego en los lienzos de tus pupilas.
Te espero en la linterna.
Y no podrá destruir la duda,
Y en los benefactores, y en el mal.

Y las estrellas jugarán en la nieve.
Me perteneces como nombre de persona.
Para siempre quedarse Betty?..
Bajo los gritos de las aves y los animales aullan.

No entiendo a la gente, ¿dónde?
Vas a ir, y los pasos son rejas.
No sé cómo disipar esta carga,
No perdería su sabiduría...