Leyendo la biblia en Mateo capítulo 7, me detuve a meditar en el versículo siete, lo interesante que es la palabra pedid, y dice de la manera siguiente: Pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá. Mateo 7:7 ¿Qué le parece? El señor nos insta a que le pidamos, él quiere bendecirnos. Se puede notar que: pedir no es malo, pero hay que ser claro y que la petición tenga buenos propósitos.

Cuando una persona acude a un ente del gobierno o a una empresa privada, para hacer una petición, de crédito o de una ayuda social; esto para dar un ejemplo: lo primero que se debe hacer es: una carta de exposición de motivos, donde plasmamos todo lo que se necesita; todo esto es importante; porque el ente que se le esté haciendo la petición, revisaran el contenido de él, y ellos deciden en que te pueden ayudar.

Ahora bien hermanos nuestro padre celestial es un Dios justo y quiere que a todos nos vaya bien; y nos dice:

pedid

El apóstol santiago, exhorta diciendo.
Pedís, y no recibís, porque pedís mal, para gastar en vuestros deleites. Santiago 4:3

Jesús presenta la situación de una anciana, que estaba pasando un momento difícil, de tribulación; el juez que estaba cargo era: cruel, malo, no temía a Dios ni tenía respeto a hombre, la situación era difícil para ella; con todo se armó de valor, fe, y constancia y día a día, iba al juez para que le hiciera justicia de su adversario.

Que bendición esta viuda logro que se le hiciera justicia; el juez con palabras no complaciente ponen fin al procedimiento.

** Lucas 18:3 al 5**

Había también en aquella ciudad una viuda, la cual venía a él, diciendo: Hazme justicia de mi adversario.
Y él no quiso por algún tiempo; pero después de esto dijo dentro de sí: Aunque ni temo a Dios, ni tengo respeto a hombre, sin embargo, porque esta viuda me es molesta, le haré justicia, no sea que viniendo de continuo, me agote la paciencia. ** Lucas 18:3 al 5**

Jesús llama la atención a sus discípulos, y tomen en cuenta la oración y tenga confianza en nuestro padre celestial. Lucas 18:1 También les refirió Jesús una parábola sobre la necesidad de orar siempre, y no desmayar, sabemos que orar es hablar con Dios, y es el momento de hacerle petición, adorarle, en acción de gracia, por todo sus veneficios.

**Y dijo el Señor: Oíd lo que dijo el juez injusto. ¿Y acaso Dios no hará justicia a sus escogidos, que claman a él día y noche? ¿Se tardará en responderles? Lucas 18:6,7 Dios les bendiga más.