Esa tendencia a complejizar las cosas - Reflexión
Hola parceros, un buen día para todos, espero que se encuentren muy bien. Me gustaría hoy tratar un tema que pienso que es importante, porque nos puede ayudar a estar mejor, a vivir más tranquilos, y tiene que ver con esa tendencia natural de muchas personas a complicar las cosas.
Sí, seguro que han conocido a personas que tienden a, como coloquialmente se dice, ahogarse en un vaso de agua, porque algo mínimo lo complican, y si no tiene ninguna complicación, parece que se la buscan. Y no estoy exagerando; sabemos que hay gente así, que tiene un problema para cada solución.

Hay cosas en la vida que son difíciles y complejas, lo sé. Nuestro cuerpo es un ejemplo perfecto: tan lleno de vías metabólicas, de sistemas interconectados, de órganos que trabajan en perfecta sincronía para mantenernos vivos. Es impresionante. Pero, ¿por qué nosotros, como seres conscientes, a veces decidimos hacer aún más complicado lo que ya es simple? No hablo de la complejidad natural de la vida, sino de esas cosas triviales que algunos terminan convirtiendo en una carga innecesaria.
Si la vida tiene sus particularidades, si todos estamos en el proceso de intentar estar cada vez mejor en un mundo que tiene sus exigencias, ¿por qué hay quienes se empeñan en añadirle peso al morral?

A veces me encuentro con personas que parece que están en una lucha constante con ellas mismas, buscando cómo hacer difícil lo fácil, cómo frenar su propio avance. Y me surge esta pregunta: ¿será que hay quienes le tienen miedo al éxito? Al principio, me parecía una idea absurda, pero con el tiempo me di cuenta de que es más común de lo que creemos. Hay quienes, consciente o inconscientemente, se sabotean a sí mismos.
Las razones para complejizar todo pueden ser muchas. Cada quien tiene sus justificaciones, sus miedos, sus aprendizajes de vida. Hay quienes ni siquiera son conscientes de que tienen esta tendencia, y aquí está el punto clave: la falta de consciencia. Porque cuando uno se da cuenta de que está complicando algo innecesariamente, ya ha dado el primer paso para cambiarlo.

Pensemos por un momento en lo siguiente: ¿cuántas veces nos hemos encontrado enredados en un problema que, visto desde afuera, no era tan grave? A veces, lo único que necesitamos es detenernos, respirar profundo y preguntarnos: ¿Esto que estoy haciendo, lo estoy complicando yo mismo?
Tal vez, parte de la solución esté en aprender a fluir, en entender que no todo en la vida tiene que ser un reto monumental. Aceptar que está bien avanzar poco a poco, que simplificar no es sinónimo de pereza ni de mediocridad.
Así que, parceros, los invito a reflexionar sobre esto. Cuando sientan que algo se vuelve demasiado pesado, demasiado complicado, hagan una pausa y pregúntense si no será que ustedes mismos están poniendo obstáculos donde no los hay. A veces, la clave para vivir más tranquilos no está en resolver todo, sino en dejar de buscar problemas donde no existen. ¿Qué opinan ustedes? ¿Les ha pasado?


Curated by : @karianaporras